sábado, 17 de diciembre de 2011

Empatía.

http://www.youtube.com/watch?v=4iboFV-yeTE&feature=player_embedded

Hombres apaleando y pisoteando a otro hombre sin palo. Todos comparten la misma naturaleza, todos son 'humanos', todos tienen ojos, nariz, boca, corazón, pulmones, cerebro. Pero no por ello los que tienen los palos y la superioridad numérica van a dejar de pegar al indefenso y pisotear al ya, muy pisoteado. Cerebro/mente/alma, como se quiera llamar, me da lo mismo. En alguno de esos compartimentos deberían estar la solidaridad, la compasión, la empatía. En lugar de eso creo que hay otro 'sentimiento' que no sé si puede más que los anteriores o es que está solo y a sus anchas. Quizá sea la adrenalina, la euforia la que ciega en momentos peligrosos y te permite hacer cosas como las que aparecen en ese vídeo. Vídeo por cierto, como cualquier otro. Uno de tantos y tantos.

Después titulares como 'El ejército se encuentra 'desolado' por la 8 muertes registradas en la represión de la plaza'. (A esto hora ya son 10, pero qué importa, es sólo un número)

No deja de causarme gracia el adjetivo desolado o la palabra registradas. Así, por arte de magia, se registran muertes, no se asesinan personas, vaya.

Parece que los egipcios van a tener que ir a la plaza muchas más veces contra 'autoridades' diferentes cada vez. No deja de ser triste, pero vaya, la historia de cualquier nación es triste, y en conjunto la de la humanidad también lo es.

Mientras, los que aún estamos a salvo en nuestras casas, escuchamos de lejos y a través de una pantalla o papel todo esto. Al principio, quizá, nos mostrábamos desolados. O, en el mejor de los casos, siempre habrá algunos pocos con una sensibilidad especial a prueba de bombas (nunca mejor dicho) o con una empatía descomunal a los que aún les afectan estas noticias. Para la mayoría, en cambio, es sólo un eco molesto. Molesto por lo monótono, no por lo desolador.
Estamos cansados de oír lo mismo. Atentados todos los días en capitales de países de Oriente Próximo/Medio, en cualquier otra ciudad cuyo nombre ya sabemos reconocer después de años y años de guerras, hambrunas en el Cuerno de África, o en cualquier otra parte con el apellido 'África' también..
Sólo parecemos despertar del sopor cuando nos toca un poco más cerca. Cuando son compatriotas los que han sido secuestrados en alguna parte del mundo por alguna organización cualquiera que busca cualquier interés propio. O cuando esos atentados tan sangrientos pasan en nuestro tan seguro primer mundo. Nueva York, Madrid, Londres, Oslo.. Como si la vida de los sobrealimentados, sobreprotegidos, sobreeducados, sobremimados fuera más valiosa que esa panda de muertos de hambre y analfabetos que he citado antes.

En fin, esta vez me he líado más de la cuenta. Quedáos con el vídeo, pero no sufráis si os lo habéis perdido, habrá más.

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